OBRAS DE ADECUACIÓN EN EL PUENTE DE HIERRO

Las continuas denuncias sobre el mal estado del puente de hierro de Valderrobres desde el año 2005 han fructificado, y por fin la infraestructura está siendo sometida a una completa renovación. Los trabajos, que comenzaron con la instalación de los andamios en la primera semana de septiembre, se están centrando en el repaso de toda la estructura para asegurar su firmeza. Asimismo, se van a soldar los nervios que estaban sueltos.
La renovación incluye el repintado de la estructura y la sustitución del firme de asfalto debido al penoso estado en que se encuentra la carretera, con numerosos baches y blandones que, según indica Carlos Boné, el alcalde de la localidad, ya ha dañado el cárter de algunos coches. En cualquier caso, las obras no afectarán a la anchura del puente, por lo que los embotellamientos en una de las principales vías de unión con la Terra Alta seguirán existiendo. Las obras corren a cargo del departamento de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes del Gobierno de Aragón. Cuentan con un presupuesto de 110.000 euros. Por su parte, la empresa Aragonesa de Obras Civiles fue la empresa constructora que consiguió hacerse con el contrato y la que está ejecutando los trabajos.
Hasta que las obras concluyan, se ha restringido el tránsito de los peatones por el puente, que para cruzar al casco viejo de Valderrobres deben tomar, obligatoriamente, el puente de piedra.
Satisfacción en ValderrobresCarlos Boné, primer edil, no oculta su satisfacción con el avance de los trabajos. “Pero el problema sigue estando ahí. Es un puente muy viejo, por donde no pueden pasar dos coches a la vez. Sería suficiente para su uso interno en la circulación en el pueblo, pero no sirve para soportar todo el tráfico de una travesía”. Boné volvía a reinvindicar así la construcción de la variante de Valderrobres, que contará con un nuevo puente para salvar el curso del Matarraña cuando el proyecto salga del papel y por fin se convierta en realidad.
A la escasa capacidad del actual puente hay que añadir los problemas derivados de los continuos reasfaltados, que han multiplicado el peso del puente provocando sobrecargas estructurales y vibraciones para los peatones cada vez que es cruzado por un vehículo. El refuerzo de los pilares y la sustitución del firme vendrán a poner solución a este problema.

(Alejandro Rivera, Periódico La Comarca, 1-X-2010)